Restablecer el nervio vago para sanar desde la raíz 

El nervio vago es como una autopista de comunicación entre tu cerebro y tu sistema digestivo. Cuando está debilitado o inflamado, la digestión se ralentiza, la motilidad intestinal se altera… y pueden aparecer problemas como el SIBO (sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado).

🔍 El SIBO no solo provoca hinchazón, gases o malestar: también perpetúa un círculo de inflamación y disbiosis que dificulta la recuperación.

💡 ¿Cómo puede ayudar el Ayuno Prolongado?
Durante el Ayuno, tu sistema digestivo descansa profundamente, permitiendo que el nervio vago recupere su tono y que los mecanismos de limpieza intestinal —como el Complejo Motor Migratorio— vuelvan a funcionar correctamente.
Este “reset” natural favorece la disminución de bacterias en exceso, reduce la inflamación y ayuda a equilibrar tu microbiota.

🌿 Al restablecer el nervio vago y reducir la sobrecarga digestiva, el Ayuno Prolongado no solo puede mejorar los síntomas del SIBO, sino también impulsar tu energía, claridad mental y bienestar general.

Si después de un Ayuno Prolongado sigues estando hinchad@ con la mayoría de lo que comes, es hora de ponerte en manos de un terapeuta integrativo que te acompañe en la sanación del SIBO. Será un proceso largo de restricción y suplementación concreta, pero vale la pena restringirse unos meses para ganar de nuevo la salud perdida y no sentirse inflamad@ cada día.